¿Qué tipos de nubes hay?

Las nubes se caracterizan por tratarse de masas formadas por gotas de agua, las cuales permanecen en suspensión alrededor de la atmósfera como resultado de la condensación de vapor de agua. Es posible que estén de pasaje o blanquitas sobre un cielo azul despejado, al igual que grises, oscuras y cargadas, indicando una próxima tormenta.

¿Cuáles son los tipos de nubes que existen hoy en día?

En cualquier caso, cuando de nubes se trata, una duda muy común suele ser cuántos tipos existen, por eso, a continuación lo estaremos explicando.

Al saber en qué consisten las nubes, es preciso decir que, de acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), hay diversas categorías básicas para agrupar las nubes según su tamaño y forma, además, es posible combinarlas entre sí. Teniendo esto en cuenta, a continuación explicamos cuáles son las clases de nubes más destacadas:

Nubes altas

Dentro de las nubes clasificadas como “altas”, se suelen incluir los siguientes tipos:

Cirros

Consisten en nubes de altura las cuales se forman normalmente entres los 6.000-18.000mts, destacan por tener una apariencia pincelada y sutil de color blanco alrededor del cielo; suelen aparecer en los cielos despejados.

Por lo general, debido a la altura en que se encuentran, las cirros están formadas por agua sólida en forma de cristales pequeños. Su presencia indica que las temperaturas bajarán durante los siguientes días.

Cirrocúmulos

Consisten en pequeñas nubes redondeadas con forma de copos de algodón, totalmente blancas y libres de sombras, de apariencia arrugada. Podrían indicar que una tormenta se acerca.

Cirrostratos

Se distinguen por ser nubes finas, con forma de velo o halo, las cuales además de cubrir el cielo también suelen difuminar los rayos solares. Podrían indicar que se acerca el mal tiempo, al igual que la llegada de un frente cálido.

¿Cuáles son los tipos de nubes que existen hoy en día?

Nubes medias

En el caso de las nubes medias, es posible señalar los tipos mencionados a continuación:

Altocúmulos

Similares a los cirrocúmulos, estas nubes poseen forma de copos más grandes y con una estructura irregular. Podrían indicar que el mal tiempo y las lluvias se acercan.

Altostratos

Suelen ser irregulares y delgadas, teniendo áreas con mayor densidad que en otras; generalmente permiten ver el sol y podrían ser indicio de lluvias ligeras.

Nubes bajas

Cuanto de las nubes bajas se trata, es posible señalar las siguientes clases de nubes:

Nimbostratos

Se caracterizan por ser densas y tener un tono gris oscuro, pese a que su nivel de opacidad puede variar. Generalmente aparecen en primavera y verano, causando lluvias durante los meses más cálidos del año.

Estratocúmulos

Generalmente, no indican lluvias y es posible distinguirlas porque poseen una forma ondulada, parecida a los cilindros alargados.

Estratos

Suelen dividirse en varios estratos o capas, teniendo un aspecto denso y un color gris; indican buen tiempo.

Pese a extenderse alrededor de todo el cielo, normalmente causan imágenes bastante peculiares en el firmamento debido a que son muy similares a la niebla que suele aparecer en las zonas más bajas de la Tierra.

Nubes desarrollo vertical

Suelen distinguirse por indicar posibles lluvias; entre ellas, se encuentran los los tipos señalados a continuación:

Cúmulos

Se tratan de nubes que, por lo general, se agrupan alrededor del cielo creando verdaderas figuras de aspecto esponjoso. Suelen formarse mediante grupos separados, los cuales recorren poco a poco el firmamento, permitiendo ver el cielo azul. Indican buen tiempo y generalmente aparecen en verano.

Cumulonimbos

Son nubes grises que poseen un desarrollo vertical más grande que las anteriores, causado como consecuencia de un movimiento violento generado por el aire ascendente. Suelen cubrir el sol y están estrechamente vinculadas a las lluvias, al igual que a las tormentas.

Formación de las nubes

En el proceso de condensación que da lugar a las nubes, las masas de aire húmedo y cálido, suelen chocar contra las de aire frío, enfriando así el aire caliente; de modo que, el vapor de agua se convierte en cristales de hielo por sublimación.

Este fenómeno ocurre de forma constante debido a que la superficie terrestre se encuentra recubierta por un 70% de agua, y al calentar mares, lagos y ríos, el sol hace que se evapore el agua, al mismo tiempo que las plantas ayudan al proceso absorbiendo la humedad presente en el terreno para luego introducirlo en el aire.

Deja un comentario